Capitulo 7
Jensen y Chad se detuvieron en el
pasillo de una de las torres.
-Bueno, olvídale. Nos hizo un favor
y tu le trajiste aquí.. No creo que debas preocuparte más con él.-Le aseguró
Chad.
-Te equivocas. No pienso olvidarme
de él ni de que está aquí. Pienso encontrarle y llevarle de vuelta a Babel 11.-
Dijo Jensen asestándole una mirada enojada.
-¿Qué más da? Este es un sitio mucho
mejor que la base. Aquí tendrá un futuro mejor… tu mismo creciste aquí.
-En efecto. Pero hay una diferencia
entre yo y ese mocoso… Yo soy mucho menos vago y tengo muchos más objetivos.
-¿Quieres que me crea que te vas a
sentir culpable de que el “crio” se convierta en un gamberro?
-No seas idiota!- Echó una ojeada a
su pequeña agenda electrónica.- No creo que pueda dar con él tan deprisa como
deseaba… Chad, busca en los archivos de la S.P.A un Humano de nombre Jared
Padalecki. Su área de registro es probablemente Babel 11.
-¿Tienes su número?- Preguntó
abriendo su agenda también.
-No, de todos modos el tatuaje no
está en un sitio que se vea muy a menudo…- Chad dio una risita burlona llegando
a la conclusión de obvia localización intima del tatuaje con el número de
registro obligatorio en todos los seres que viviesen dentro de las fronteras de
la S.P.A.
-Bueno, cuando tengas el archivo
envía la foto a todos los militares y que estén atentos… pero que sean
discretos, no quiero que esto llegue al consejo… ya tengo problemas
suficientes.- Gruñó Jensen.
-Claro, ¿y tú qué vas hacer?
-Me voy a la cama, estoy exhausto.-
Jensen se encaminó a su aposento y una vez allí encendió las luces y tomó
asiento en un sillón.
Decidió evaluar el entorno de su
viejo aposento. Seguía realmente bien cuidado a pesar de sus largas ausencias
en solladac. Su habitación era amplia y contaba con un lecho equipado con un
colchón de plumas y sabanas de seda. También había un gran salón con un balcón
desde el que se disfrutaba de un esplendido panorama que abarcaba casi dos tercios
del horizonte.
Cruzó la estancia principal y fue
hacia el salón y tomó asiento delante de una de las sillas situadas delante de
un holograma con el mapa del planeta.
El capitán puso la mano sobre las
plateadas chapas de su identificación que llevaba al cuello y durante unos
instantes sus dedos se cerraron sobre ellas pensativamente. Resopló enojado. A
veces parecía que Jared intentaba irritarle con deliberado placer y otras que
solo quería provocarle.
Aunque intentaba borrar su imagen de
sus pensamientos, el esfuerzo era en vano. Parecía que por primera vez no podía
separar su misión privada de su misión oficial.
Dudó por unos instantes, ¿estaría
Jared convirtiéndose en algo personal? Tuvo que admitir que de una manera u
otra ya se había convertido en su pequeña y particular misión. Deseaba conocer
su paradero.
Decididamente no podía acostarse con
la cabeza tan llena de cosas. Busco un cigarrillo por los bolsillos de su
uniforme pero en vez de encontrar una caja llena, se dio cuenta de que ya había
fumado el ultimo hacían horas.
Se levantó un poquito más irritado
cuando alguien llamó a la puerta. Cuando la abrió su ceño se frunció aun más y hecho
un resoplo que casi movió su flequillo.
Dos guardias sujetaban a Jared por
los brazos y lo empujaron a dentro con tanta rudeza que le hizo perder la
estabilidad y tropezar en sus propios pies. Los guardias se retiraron y Jensen
cerró la puerta.
-¿Qué haces ahí tumbado en el suelo?
-Me he caído imbécil!- roznó Jared,
obviamente nada feliz por haber sido encontrado. Jensen puso los ojos en blanco
y se alejó.
-¿Qué haces aquí? ¿Porque te has
metido de polizón en mi nave?- Jared se levantó y se acercó a él
-mmm podría mentirte…
-Podría ahorcarte.
-Vale! Vale, te diré la verdad! Es
que... quería estar contigo…- miró al suelo como una niña avergonzada. – Jensen
levantó una ceja y dijo:
-Vale, segunda oportunidad…
-Uf.. vaalee… estaba harto de babel
11, todo el mundo tiene derecho a una vida mejor ¿no?- Le encaró y se limpió el
sudor de la frente con la camiseta vieja.
-Este no es lugar para ti.- dijo tan
solo.
-Eso soy yo quien lo decide- Se
recostó sobre sus codos sin levantarse del suelo.
-Fui yo quien te trajo, así que yo
lo decido!
-Oye, oyee.. Solo porque me hayas
traído aquí y me hayas follado hace noches no significa que seas mi dueño!
-¿Y quien dijo que pretendo ser
dueño de una pequeña puta estelar?- dijo Jensen desinteresadamente.
-Cuidadín con la lengua viejete!-
gruñó.
-Hace noches no parecías quejarte de
ella…
-¿Qué más te da que me quede?
-No puedes estar aquí, mucho menos
quedarte!
-¿Y por qué no?
-Oh dios!, si que eres imbécil…
¡porque es militar!- Resopló.
-¿Todo el planeta es militar?
-sí, aquí se reúnen el consejo de la
S.P.A. Aquí viven los más distinguidos nobles de todo el universo.
-Bueno…- Jared se encogió de hombros
y sonrió.- Hasta las casas más ricas tienen ratas.
-Ya.- Jensen le devolvió una sonrisa
llena de cinismo- justo para eso están aquí los militares, para exterminar las
pequeñas ratas que se cuelan, como tú…
-Ah bien… y tu como buen militar
¿qué piensas hacer conmigo? ¿Me vas a exterminar?
Jensen le sonrió y se arrodilló en
el suelo rozando su dedo sobre la bragueta cerrada de Jared se seguía echado en
el suelo.
-No creo…- abrió la bragueta
mirándole con picardía.
-¿Qué haces?
-¿Tú qué crees?... puedo dejarlo si
no quieres…- murmuró lamiéndose los labios.
-Hmm… no, no pares.- Levantó un poco
las caderas para ayudarle con los pantalones. Jensen sonrió cuando lo tuvo
expuesto.
-Abre bien las piernas… quiero verlo
todo…- Su mano acarició con suavidad el pene de Jared que parecía ganar vida a
cada embestida.
-Dios… ¡eres un cochino!
-Abre!- Jensen le pegó una cachetada
en el muslo.
-¿Para qué?
-Para catalogarte el número de serie
como si fueras un animal, no te creas que te la voy a chupar…- Jared abrió los
ojos como platos obviamente sorprendido.
-Ni lo sueñes!- intentó subirse los
pantalones y cerrar las piernas, pero su postura vulnerable le impidió dejando
que el otro hombre pudiese alcanzar a ver el numero en la ingle junto a la base
de los testículos.
-Muy bien, ya puedes vestirte.- Le
soltó.
-Eres un idiota! Argh te odio!
-No ganarás nada con eso… puedes
odiarme lo que quieras. La culpa no es mía que te hayan grabado ahí el numero…-
comentó el capitán levantándose del suelo.
-¡No me refiero a eso!
-Te lo he explicado. Ahora puedes
irte a dar una vuelta si te place, o quédate aquí… ya te localizaré cuando sea
necesario.
-Hm! Déjame adivinar cómo me van a
localizar, me pedirán para ver el numero.
-Vaya... que sitio más malo para
grabártelo…
-No te burles! – Se levantó y se
cerró la bragueta.
-Entonces será mejor que andes
cerca… voy a dormir, puedes quedarte con el suelo.- Le dio la espalda y se
metió en la habitación.
Qué bien, otro capítulo de Stellar. Pero cada vez me parecen más cortos, será porque me gusta mucho esta historia o porque los haces más cortos de verdad... El caso es que me encantan estos dos personajes sobre todo el pasota de Jared, jajaja. Besoss.
ResponderEliminarHola!! Estoy de acuerdo con Minu!! Aunque creo que es q la historia es muy buena e interesante, por eso la vemos corta! Gracias por otro capitulo, Saito!! Beaos y Abrazos!!
ResponderEliminarEdmarie
Es un buen capítulo, pero pobre Jared, Jensen se la ha jugado bien. Espero que pronto subas la continuación. Muchas gracias.
ResponderEliminarEste comentário foi removido pelo autor.
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